Seguramente habrás escuchado a las chicas, en muchas ocasiones: “Tengo los pies destrozados…; No siento los pies; Como me duele la espalda, etc…”
Y sobre todo, después de ir a algún evento de etiqueta o salir un Sábado noche, pero…
¿Alguna vez te han explicado el POR QUÉ de esto?
Resumiéndolo mucho y para que lo entiendas rápidamente: los extremos o el abuso repetido de “algo”, no suelen ser bueno para nuestro bienestar. En este caso me refiero al uso continuado (en el tiempo) de tacones o calzado totalmente plano (sin forma anatómica).
Estructuralmente hablando, el cuerpo está preparado y diseñado naturalmente de una forma totalmente perfecta y armónica para su correcto funcionamiento y distribución del peso corporal, como si un de “un gran equipo de trabajo” se tratase. Donde cada estructura, está diseñado a medida para que cumpla, cada una, con su función correctamente, dentro del conjunto estructural.
Ahora bien, si nosotros modificamos o estropeamos esta armonía, ya bien sea con una mala postura repetida (en el tiempo), un mal movimiento repetitivo constante, un calzado o complemento inadecuado, etc… es cuando aparecen las molestias.
A modo de metáfora, si lo comparamos con un equipo de trabajo en el que dependan unos del trabajo de los otros…
“Si dentro de una empresa con un gran equipo de trabajo productivo y bien organizado (como si de una máquina bien engrasada se tratase), en el que se respira un ambiente relajado, de paz, buen rollo y orden, etc…, cada uno cumple con su tarea de trabajo asignada, todo irá genial para todos y no habrá ningún problema. ¿Verdad?
Pero, si por el contrario, alguien no cumple con sus tareas asignadas, empieza a haber retrasarse con sus tareas, falta algún integrante del equipo, hay alguna baja, etc… El conjunto y la armonía de la empresa se ven afectados, en el afán de querer subsanar temporalmente un déficit “X”. La producción no es la misma, se carga de trabajo extra a los demás compañeros de la cadena impidiendo que estos realicen o cumplan sus tareas correctamente, etc… Al final todo termina en una sobrecarga de trabajo, con tal de conseguir/subsanar el funcionamiento habitual de la empresa.”
En definitiva, esta armonía, se rompe. Y empiezan a aparecer los desajustes a corto o largo plazo.
Mira, he rescatado un video donde te explicará de una forma gráfica, sencilla y rápida el PORQUE de estas afirmaciones, tan conocidas por much@s. Espero que te guste.
Ver vídeo “¿Por qué los tacones son peligrosos?” en YouTube
Estaré encantada de recibir tu comentario, opinión al respeto o sugerencia sobre este o más temas.
Muchas gracias por tu atención y espero que te guste.