RESIDENCIAL MARZO 2017
Muy buenos días a todos,
Simplemente me gustaría compartir con vosotros y con todos mis compañeros de este último Residencial de 4 días en Punta de Couso (Cangas), unos pequeños recuerdos para tener bien presentes algunos de los aprendizajes que hemos recibido cada uno de nosotros, en esta etapa del camino, al lado de Kirill Yurievich, una excelente persona y un gran Maestro.
Me quedo con muchas cosas, vivencias y momentos compartidos de este viaje. Pero sin duda, me quedo con dos…
Una, es la claridad, potencia y a la vez la sutileza con la que este Trabajo, te revela y te muestra el momento de tu historia personal en la que te encuentras.
Lo curiosa y paradójica, que resulta la imagen de que a pesar de que fuera del círculo o incluso de la sala hiciese temporal de viento, lluvia, etc… y dentro del círculo se podía palpar y respirar un ambiente de calma, paz y confianza absoluta (Quietud).
Una metáfora muy clara, para visualizar (físicamente) ¿en qué momento de tu vida (grado de despertar), te encuentras?.
Donde esa tormenta, temporal, ruido, “caos”, etc… representa todo aquello que nos rodea en nuestro día a día, y nos afecta desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. Dejando así, de mantenernos presentes en el momento presente.
Y donde esa calma, paz y confianza absolutos del círculo… representa esa habitación en nuestro interior donde solo hay eso, QUIETUD. Y donde estamos en paz con nosotros mismos y con todo aquello que nos rodea. Aquí, todo está bien, no necesitas nada más. No hay lugar para la patología. Es un lugar en uno mismo donde se está muy a gustito.
Encontrar ese espacio o esa habitación dentro de uno mismo, es algo que tu cuerpo te revelará en el momento oportuno, cuando estés preparado para encarnarlo. Y le des ese espacio y esas condiciones seguras para escucharlo. Alcanzando así, esa profundidad en el camino hacia tu interior.
Entonces encontrarás tu ESENCIA y será como regresar a casa.
Y el segundo momento es:
La enseñanza tan grande e importante que nos ha brindado (a todo el grupo) tanto esa gotera de agua en la sala como una persona en concreto, la cual ha tenido la valentía y el coraje de enfrentarse y entregarse al Trabajo por completo. Escuchando y entrando en contacto con sus sensaciones corporales y con una parte de su historia personal que nada más que estaba esperando ser escuchada, abrazada y revelada para luego dejar de ser una molestia o una carga.
En este caso, el desencadenante ha sido en forma de una simple gotera, tan oportuna como necesaria. Una condición más (ingrediente) del Universo que nos rodea para ponernos a prueba y hacernos entrar en contacto con las diferentes sensaciones corporales y sentimientos o emociones que se van despertando en nosotros, con tan solo su sonido. Y que seguramente en muchos casos, ni sabíamos que lo teníamos ahí guardado, causándonos tanto daño y sufrimiento.
No son más que sensaciones, experiencias vividas o partes de nuestra historia, que estaban esperando a ser escuchadas.
En definitiva, esto es exactamente lo que ocurre cuando nos mantenemos en el momento PRESENTE.
Y sin más, no me queda más que agradecer al Universo, por todas esas personas, situaciones, retos y condiciones (ingredientes) que va poniendo en mi camino y que me van haciendo despertar, cada día un poco más.
Y también aprovecho para agradecer los comentarios que me vais haciendo, en persona, sobre los post que voy escribiendo.
Bueno y ya me despido, quedando a la espera de recibir vuestros comentarios y participaciones en este blog o en las redes sociales. Estaré encantada de responder a todos ellos.
Muchas gracias por tu tiempo y tu atención.
Nos vemos pronto.
No te olvides de pedir tu cita.
Te esperamos.
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